Sección de análisis de temas de actualidad

Sobrepeso/obesidad: Prevalencia, riesgos y consecuencias

El sobrepeso/obesidad conviven con nosotros desde hace décadas y a juzgar por su crecimiento vertiginoso parece ser que nuestros esfuerzos por combatirlos han sido poco menos que inconsistentes. En el año 2016, la Organización Mundial de la Salud (OMS) difundió un informe sobre la prevalencia mundial del sobrepeso/obesidad (1), cuyas cifras eran particularmente alarmantes:

  • La prevalencia mundial de obesidad se había triplicado entre 1975 y 2016.
  • Más de 1250 millones de personas mayores de 18 años presentaban sobrepeso.
  • Más de 650 millones de personas mayores de 18 años presentaban obesidad.
  • Más de 340 millones de adolescentes entre 5 y 19 años presentaban sobrepeso u obesidad. En este grupo etario se había pasado de una prevalencia mundial de sobrepeso/obesidad de 4% en 1975 a una prevalencia mundial de 18% en 2016 y específicamente en el caso de la obesidad, se había pasado de una prevalencia mundial de 1% en 1975 a una prevalencia mundial de entre 6% (niñas) y 8% (niños) en 2016.
  • Más 38 millones de niños menores de 5 años presentaban sobrepeso u obesidad.
  • La mayor parte de la población mundial vivía en países donde la obesidad mataba más personas que la desnutrición.
  • La obesidad ya no era un problema exclusivo de países de altos ingresos ahora, estaba presente en países de medianos y bajos ingresos (exceptuando algunos países asiáticos o de África subsahariana).
  • En algunas partes de África, el sobrepeso había crecido aproximadamente 24% desde el año 2000.

Lamentablemente, el crecimiento de la prevalencia del sobrepeso/obesidad en el mundo está siguiendo una pendiente ascendente y aparentemente irreversible. Según estimaciones globales, para el 2030 se anticipa un crecimiento significativamente grande de la prevalencia mundial de sobrepeso/obesidad en prácticamente todas las regiones del mundo. Se calcula que alcanzará al 65.8% de la población de Oceanía, 45.5% de la población de Asia, 44.5% de la población de Norteamérica, 42.1% de la población de África y 35.2% de la población de Sudamérica (2).

En el Perú, el crecimiento del sobrepeso/obesidad ha sido sostenido en los últimos años. Según información de la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (ENDES 2019) (3), durante el 2019, el 37.8% y 22.3% de las personas mayores de 15 años presentaban sobrepeso y obesidad, respectivamente. Tras casi dos años de encierros y limitaciones para ejercer una actividad física plena y con cambios marcados en los patrones alimenticios, es probable que estas cifras alcancen niveles insospechados.

Ahora bien ¿cuáles son los riesgo o consecuencias de presentar sobrepeso/obesidad?

Desde la niñez, el sobrepeso/obesidad puede causar un impacto negativo, deletéreo, crónico y, si se trata tardíamente, irreversible sobre el estado de salud del individuo. Twig et al (4) investigaron la aparición de diabetes mellitus tipo 2 (DM2) en la edad adulta en adolescentes con obesidad. El estudio multicéntrico llevado a cabo entre 1996-2016 en Israel, evaluó a 1,462,362 adolescentes: el 56.9% y el 61.1% de hombres y mujeres respectivamente, con IMC elevado, desarrollaron DM2 en un periodo promedio y no mayor de 10 años.

Probablemente, una de las principales razones por las cuales es tan difícil atacar este problema, está asociada con nuestra, todavía escasa, comprensión de la complejidad del mismo. Se suele confundir con mucha frecuencia, tejido adiposo con masa grasa; se piensa que el sobrepeso/obesidad es un problema que solo tiene que ver con el peso y se busca diferentes estrategias para que la persona pierda kilogramos cuando en ello, podríamos estar complicando más su condición. El índice de masa corporal (IMC) es la más simple, rudimentaria, poco sensible pero ampliamente utilizada herramienta para clasificar el estado antropométrico de los individuos. A pesar de ello, un metaanálisis que involucró a 10.6 millones de personas procedentes de Asia, Australia, Nueva Zelanda, Europa y Norteamérica encontró un crecimiento exponencial en los riesgos de mortalidad asociados con la obesidad; no obstante, cabe precisar algo sumamente interesante, el punto de corte que marcaba el inicio de la obesidad fue establecido en 30 kg/m2 para los caucásicos y en 27.5 kg/m2 en surasiáticos y chinos, lo cual significa que debemos tener mucho criterio al momento de implementar recomendaciones provenientes de otras regiones del mundo.

Metabólicamente, el incremento del tejido adiposo a través de un proceso de hiperplasia, o hipertrofia o una combinación de ambos genera cambios bioquímicos y funcionales en el adipocito que lo convierten en un emisor permanente de citoquinas proinflamatorias tales como el factor de necrosis tumoral, la interleucina 1, la interleucina 6, además de radicales libres que llevan al organismo a un estado permanente de estrés oxidativo que estimula la hiperplasia y genera un círculo vicioso llamado metainflamación o inflamación de bajo impacto, que condiciona la aparición de DM2, hígado graso no alcohólico, dislipidemias, enfermedades cardiovasculares entre otras.

En términos gastrointestinales, la obesidad incrementa significativamente el riesgo de presentar enfermedad por reflujo, esofagitis erosiva, cáncer gástrico, litiasis vesicular, pancreatitis aguda o pólipos, entre otras condiciones (tabla 1). Además, el sobrepeso/obesidad también condiciona la aparición de apnea del sueño, problemas cardiovasculares, problemas articulares, dermatológicos, renales y psicosociales, muy difíciles de tratar.

 

Tabla 1. La obesidad como factor de riesgo de desarrollar enfermedad gastrointestinal

Enfermedad gastrointestinal Obesidad como factor de riesgo
Riesgo expresado como OR o RR 95% CI
Esófago    
Enfermedad por reflujo OR, 1.94 1.46-2.57
Esofagitis erosiva OR, 1.87 1.51-2.31
Esófago de Barrett OR 4.0 1.4-11.1
Adenocarcinoma esofágico Hombres: OR 2.4 1.9-3.2
  Mujeres: OR 2.1 1.4-3.2
  RR, 2.23 3.0-7.7
Estómago    
Gastritis OR, 2.23 1.59-3.11
Cáncer gástrico OR, 1.55 1.31-1.84
  RR (Cardias), 1.8 1.3-2.5
Hepatobiliar    
Hígado graso no alcohólico RR, 4.6 2.5-11.0
Cirrosis hepática RR, 4.1 1.4-11.4
Carcinoma hepatocelular RR, 1.8 1.6-2.1
Litiasis vesicular Hombres: RR 2.51 2.16-2.91
  Mujeres: RR 2.32 1.17-4.57
Cáncer en la vesícula RR, 1.3 1.2-1.4
Páncreas    
Pancreatitis aguda RR, 2.20 1.82-2.66
Cáncer al páncreas Hombres: RR 1.10 1.04-1.22
  Mujeres: RR 1.13 1.05-1.18
  RR, 1.5 1.2-1.8
Intestinal    
Diarrea OR, 2.7 1.10-6.8
Enfermedad diverticular RR, 1.78 1.08-2.94
Pólipos colónicos OR, 1.44 1.23-1.70
Cáncer colorrectal Hombres: RR 1.95 1.59-2.39
  Mujeres: RR 1.15 1.06-1.24
  RR, 1.3 1.3-1.4

Fuente: Extraído de referencia 5

 

Desde el punto de vista inmunológico, aunque la persona con sobrepeso/obesidad vive en un permanente estado inflamatorio directamente proporcional con el nivel de adiposidad de su cuerpo, esta acumulación de grasa produce un estado de envejecimiento prematuro de la respuesta inmunológica a consecuencia de la acumulación de grasa ectópica en la médula ósea (6). La obesidad está asociada con una respuesta fallida frente a las vacunas y la respuesta frente a agentes virales. La pandemia por la COVID-19 ha desnudado de la peor manera todo el daño que la obesidad puede ejercer sobre el cuerpo y el riesgo elevado de complicaciones que el paciente con obesidad puede presentar (Ver ¿Por qué la obesidad está asociada a cuadros más severos de COVID-19)

Aunque todavía no es un evento totalmente controlado, el retardo en el crecimiento dejó de ser el primer y más importante problema de nutrición en nuestro país. Hace mucho tiempo que el bajo peso dejó de causar la muerte. En la actualidad, la mayor parte de las muertes y problemas de salud están, directamente o indirectamente, asociados con el sobrepeso/obesidad. Es nuestra obligación como profesionales de la nutrición levantar y hacer escuchar nuestra voz. No permitamos que suceda lo mismo que sucedió con el retardo en el crecimiento: se analizó tan mal que, durante años, la aproximación más concreta estaba relacionada casi exclusivamente con el reparto de comida.

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Por Robinson Cruz

*Robinson Cruz es Director General del Instituto IIDENUT. Cuenta con 20 años de experiencia como nutricionista clínico y especialista en Bioquímica aplicada a la Nutrición. En este tiempo ha formado miles de profesionales de la nutrición, ha publicado casi una decena de libros y cientos de comunicaciones relacionadas, entre otras actividades.

 

 

Referencias bibliográficas

  1. World Health Organization (2020). Obesity and Overweight. Available at: https://www.who.int/news-room/fact-sheets/detail/obesity-and-overweight (acceso 07 de mayo de 2021).
  2. Ampofo, A. G., and Boateng, E. B. (2020). Beyond 2020: Modelling obesity and diabetes prevalence. Diabetes Res. Clin. Pract. 167:108362. doi: 10.1016/j.diabres.2020.108362
  3. Instituto Nacional de Estadística e Informática. Encuesta demográfica y Salud Familiar. ENDES 2019. Visto en: https://www.inei.gob.pe/media/MenuRecursivo/publicaciones_digitales/Est/Endes2019/Libro.pdf
  4. Twig G, Zucker I, Afek A, Cukierman-Yaffe T, Bendor CD, Derazne E, Lutski M, Shohat T, Mosenzon O, Tzur D, Pinhas-Hamiel O, Tiosano S, Raz I, Gerstein H, Tirosh A. Adolescent Obesityand Early-Onset Type 2 Diabetes. Diabetes 2020.
  5. Ansari S, Haboubi H, Haboubi N. Adult obesity complications: challenges and clinical impact. Ther Adv Endocrinol Metab.2020; 11: 2042018820934955.Published online 2020 Jun 22. doi: 1177/2042018820934955
  6. Andersen C, Murphy K, Fernandez M. Impact of Obesity and Metabolic Syndrome on Immunity. Adv Nutr. 2016 Jan; 7(1): 66–75. Published online 2016 Jan 7. doi: 3945/an.115.010207

 

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